En caso de que hayas estado viviendo bajo una roca durante los últimos 18 meses, no debería sorprenderte que el mercado inmobiliario en Connecticut no esté yendo muy bien.
Anecdóticamente, la semana pasada estuve en la oficina del secretario municipal de una localidad, registrando una escritura y una hipoteca. Como siempre hago, hojeé una pila de presentaciones recientes de días anteriores. Le comenté a la secretaria municipal que las pilas de documentos son mucho más delgadas incluso que hace un año.
La secretaria municipal me informó que las presentaciones en su oficina habían disminuido un 50% en comparación con el año anterior. Dijo que ese número sería mucho más alto de no ser por el aumento en la presentación de gravámenes, avisos de ejecución hipotecaria y avisos de litigios pendientes.
Esperemos que el mercado inmobiliario esté cerca de tocar fondo.
